PINTOR DE BATALLAS
Augusto Ferrer-Dalmau, se encuentra, desde el 23 de agosto, en Afganistán. Al más puro estilo de los pintores de batallas del siglo XIX,
El artista permanecerá once días en zona de operaciones haciendo bocetos, tomando apuntes y pintando, mientras convive con las tropas españolas de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF).
Ferrer-Dalmau comparte experiencias con el contingente de la ASPFOR XXXI, formado sobre la base de la Brigada Paracaidista, junto a un grupo de periodistas españoles. La Base "Ruy Gónzález de Clavijo", en Qala i Naw; el puesto avanzado de combate (COP) "Rickets", en Moqur; y el de "Camp Arena", en Herat, serán las posiciones españolas en la provincia de Baghdis que visitará el pintor.
Por el momento, en Moqur, el artista ha podido trabajar sobre un ejercicio de tiro de la batería de artillería afgana de la 3ª Brigada del 207 Cuerpo de Ejército del ANA (Ejército Nacional Afgano), en el que se puso de manifiesto la labor realizada por los equipos españoles de instructores, mentores y asesores -conocidos como OMLT y MAT- del ANA. También ha visitado el Cuartel General de la 3ª Brigada Afgana, en Qala i Naw, donde ha departido con su jefe de Estado Mayor y ha observado a la Policía Militar en actividades de mantenimiento de la seguridad y a la Unidad de Zapadores, entrenada en la limpieza de rutas y detección de artefactos explosivos improvisados (IED).
El pintor ha participado ya en seis convoyes y cinco patrullas conjuntas de las fuerzas españolas y afganas, una en Moqur y otra en la zona de Teimuri, ambas al norte de Qala i Naw, en primera linea
Es la primera vez que un pintor español acude a una misión en el exterior para colaborar con el Ministerio de Defensa. Sin embargo, no es una práctica excepcional en otros ejércitos (por ejemplo, el Cuerpo de Marines del US Army cuenta en la actualidad con tres "artistas de guerra" oficiales -uno de ellos es Michael Fay, que ha plasmado en sus pinturas la participación norteamericana en Irak y Afganistán-), como tampoco lo fue en tiempos pretéritos; basta recordar a Vasily Vereshchagin (Guerra Ruso-Turca, Guerra Ruso-Japonesa) o a William Simpson (Guerra de Crimea, Guerra Franco-Prusiana), ambos privilegiados testigos y famosos pintores de importantes contiendas del siglo XIX.
